El absentismo laboral es, en la mayoría de los casos, una mala señal. Para cualquier empresario, ver cómo sus trabajadores no cumplen sus obligaciones horarias resulta un motivo de preocupación. ¿Quieres conocer cuáles suelen ser los motivos más habituales del absentismo? ¡Sigue leyendo!
¿Qué es el absentismo laboral?
El absentismo laboral puede definirse como el abandono del lugar de trabajo y la desatención de los deberes propios de este. Es decir, se da un caso de absentismo cuando el trabajador se encuentra ausente de su puesto de trabajo en las horas en las que debería encontrarse allí.
Esencialmente, puede decirse que existen los siguientes tipos de absentismos:
- Previsible y justificable. El trabajador ha avisado debidamente a la empresa de que no podrá trabajar y lo justifica (baja por paternidad, asuntos personales, etc.).
- No previsible y no justificado. El empleado no avisa de que va a faltar y, además, no justifica su falta.
El absentismo está regulado en el artículo 54 y siguientes del Estatuto de los Trabajadores. De esta regulación, derivan las sanciones, de las que ya te hemos hablado detalladamente
en otro artículo. En resumen, hay tres tipos de sanción.
- Para el absentismo leve, la amonestación.
- Para el absentismo grave, la suspensión del empleo y sueldo.
- Para el absentismo muy grave, el despido.
Algunos datos clave sobre este problema
- Cada día, más de 1 millón de personas no acuden a su puesto de trabajo.
- El 26,4 % de los que faltan a su puesto de trabajo lo hacen injustificadamente.
- Según los casos, el absentismo puede reducir en un 20 % el rendimiento de una empresa mediana.
Principales motivos del absentismo
¿Cuáles son las verdaderas razones que llevan a una persona a faltar a su puesto de trabajo? La respuesta la tienes en estos tres motivos más frecuentes:
- Personales. Son cuestiones independientes de la empresa y del ambiente de trabajo. Abarcan las siguientes:
- Fuerza mayor (como la imposibilidad de desplazarse por una avería del coche o un temporal grave).
- Cuestiones familiares (tener que cuidar de un enfermo o acompañar a un menor a algún lugar).
- Cuestiones personales (como la baja por paternidad o una baja médica).
- Organizacionales. Derivan de una mala percepción de las condiciones laborales y posibles consecuencias negativas sobre la salud o la motivación:
- Burnout (por ejemplo, cuando se tiene demasiada carga de trabajo).
- Insatisfacción y falta de motivación (por la mala organización y planificación de la compañía).
- Mobbing (se da cuando un trabajador sufre acoso de sus compañeros o superiores).
- Casos deliberados. Son casos donde la única razón es la voluntad del trabajador. Suelen darse por una falta de supervisión.
¿Cómo reducir el absentismo en tu empresa?
No existe una fórmula mágica para hacer desaparecer este problema ya que, como hemos visto, puede ser síntoma de un conflicto más profundo con la organización. Lo que sí te podemos dar son algunos consejos prácticos que te servirán de base para cambiar las dinámicas y que tus trabajadores falten menos al trabajo:
- Mejora el clima laboral para que los empleados tengan una mejor actitud en el puesto de trabajo.
- Permite una mayor flexibilidad horaria.
- Mantén buenos niveles de motivación general.
- Negocia las condiciones laborales para que sean satisfactorias.
- Usa herramientas de fichaje de calidad.
El problema de ir a trabajar enfermo
Como probablemente sepas, cuando un trabajador está de baja no cobra los tres primeros días. Si a esto le sumamos el hecho de que muchos empleados tienen miedo a ser despedidos si faltan al trabajo nos encontramos con que, para no ser tachada de absentista, mucha gente vaya a trabajar estando enferma. ¿Cómo afecta esto a la empresa? Las principales consecuencias son:
- La multiplicación de posibilidades de contagio a otros empleados.
- El incremento de errores y descuidos por parte del personal que no está en condiciones de trabajar, que, dependiendo de la tarea, puede derivar en accidentes laborales.
- Y el aumento de posibles bajas por enfermedad que se podrían haber evitado.
La mejor manera de controlar estas situaciones es crear
un clima de confianza e implicación, donde tus trabajadores confíen en ti.
¿Y qué pasa en caso de enfermedad leve sin baja médica?
Aunque no se tenga una baja médica, si existe una enfermedad se puede hablar de absentismo laboral justificado. En todo caso, está en tu mano mantener una buena relación y comunicación con tus empleados. Esta será la mejor manera de lograr que ellos sientan la comodidad de comunicarte su situación y la posible negociación de soluciones.
En conclusión, el absentismo laboral es un tema importantes para las empresas. Llevar un control exacto de cuándo y por qué los trabajadores no están en su puesto es el primer paso para poder detectar si el absentismo es algo puntual o se trata del síntoma de un problema mayor.
Por eso, una buena herramienta para fichar puede ser el primer paso para disponer de
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