Base imponible: todo lo que debes saber este 2022

Artículo sobre Gestoría y asesoría publicado por Doiser

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La base imponible es una de las partes principales de cualquier tipo de factura. Por ello, es muy importante que conozcas este concepto y cómo calcularlo de manera adecuada. ¿Te quedan dudas sobre cómo elaborar tus facturas de forma correcta? Sigue leyendo y responderemos a todas tus preguntas. ¡Empezamos!

¿Qué es la base imponible?

La base imponible de una factura es la cantidad principal, a partir de la cual se pueden calcular tus impuestos. Cualquier tipo de transacción económica que lleves a cabo está sometida a unos tributos como el IVA o el IRPF. En cualquier factura que emitas, será la cantidad a partir de la que calcularás otros conceptos como los impuestos.

La cantidad resultante de haber aplicado estos impuestos a las diferentes bases imponibles de cualquier factura es lo que se conoce como cuota tributaria. La suma de ambos conceptos es lo que determinará el valor total de la factura. Este aspecto está definido en el artículo 50 de la Ley General Tributaria. Al final, es el valor o la magnitud que calculas al valorar cualquier tipo de hecho imponible.

¿Cómo se calcula la base imponible de una factura?

A la hora de calcularla deberás tener clara la regulación correcta para cada uno de estos tributos. En líneas generales, existen tres métodos diferentes de estimación, cada uno de los cuales tiene sus características. Los principales son los siguientes:

Estimación directa

Es uno de los principales que podemos encontrar en nuestro sistema tributario y de los más comunes. Es un método que pretende adecuar el valor real de cada uno de los elementos que podemos medir. En este tipo de estimación adquiere una especial relevancia cada declaración que presentemos, así como los datos consignados en los libros y los registros.

Estimación objetiva

Una de las principales características de este método es que es voluntario. En este caso, la administración y el sujeto no medirán el hecho imponible de forma directa. En su defecto, tendrás que emplear una serie de medidas e indicadores a partir de los que se calculará lo que se denominan «bases imponibles medias».

Resulta un método que puede aplicarse de una forma realmente sencilla para las pequeñas y medianas empresas. Sin embargo, este sistema no mide de forma real la capacidad económica que podamos tener, sino que se basa en algunas métricas objetivas.

Actualmente, solo se utiliza en determinados casos para calcular el valor del IVA o de IRPF que deberá pagar una empresa o negocio.

Estimación indirecta

Finalmente, este es el método que se aplica en una menor cantidad de casos e incluso tiene un carácter excepcional. La Administración acude a esta metodología cuando no cuenta con los datos suficientes para poder llevar a cabo una cuantificación completa.

Por ejemplo, en aquellos casos en que no se hayan presentado todas las declaraciones necesarias o el contenido sea inexacto. Es, por ende, un régimen considerado subsidiario, donde los datos que determinan las bases imponibles son de carácter totalmente indiciarios.

Sin embargo, para evitar problemas, a la hora de usar este método de estimación será necesario que el organismo público correspondiente presente un informe en el que se determinen las razones que han llevado a la aplicación de este sistema. La contabilidad y los diferentes registros también deberán estar presentes.

Cálculos en 2022: IRPF, IVA, facturas y sociedades

Una vez que tienes claro el concepto de base imponible es el momento de hacer un breve repaso a los diferentes impuestos con los que te vas a encontrar en este ejercicio contable:

Uno de los principales es el IRPF. Este impuesto debe aparecer en cualquier factura de una persona física que trabaje por cuenta propia. Será del 7 o del 15 % en función de la antigüedad del autónomo. Cada empresa deberá liquidar trimestralmente este impuesto.
En cambio, el IVA deberá estar presente en cualquier tipo de factura. Siempre será del 21 %, y al igual que el IRPF, las empresas deberán pagarlo a Hacienda trimestralmente.
Finalmente, en el caso de que la empresa genere más beneficios que el año anterior,, será necesario que tribute por el Impuesto de Sociedades.

Hasta aquí nuestro resumen sobre la base imponible y cómo saber calcularla correctamente es tan importante para evitar problemas con la Administración. ¿Te quedan dudas o prefieres que un profesional se encargue de estas tareas? Entonces, contacta con las asesorías que encontrarás en nuestro portal. Sus expertos se encargarán de realizar todos los cálculos contables que necesites, si errores ni imprecisiones. ¡Pídeles presupuesto sin compromiso!

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