¿Es obligatorio contratar un seguro de responsabilidad civil?

A pesar de que no siempre es obligatorio contar con un seguro de responsabilidad civil o RC, contratarlo es una magnífica idea si eres autónomo o empresario. Por ejemplo, imagina que un cliente sufre un daño mientras está en tu establecimiento. Si hiciera una reclamación formal exitosa, estarías obligado a pagar la indemnización que corresponda a no ser que tengas contratada una póliza de RC, en cuyo caso, sería la entidad aseguradora la que correría con el gasto.

Es la obligación de reparar un daño que se ha causado a una persona debido a una omisión o una acción cuando has cometido una negligencia. Esta obligación de reparar el daño causado se traduce en el pago de una cuantía económica en concepto de indemnización. La cantidad, dependiendo de la actividad, puede ser tan elevada que suponga la quiebra de un negocio.

Por otro lado, la legislación vigente establece que no solo eres responsable de una omisión o acto propio, sino también de los de aquellas personas por las cuales debas responder. Un ejemplo sería un autónomo, el director de un negocio o un empresario, que responden por sus trabajadores mientras estos ejercen sus funciones.

En primer lugar, hemos de señalar que la normativa dice que cada sector de actividad empresarial o profesional determina cuándo es o no obligatorio el seguro de responsabilidad civil. Cuando das de alta tu empresa, la administración correspondiente te informa acerca de la obligatoriedad de contratar o no un seguro de RC para dicha empresa.

En el caso de los autónomos sucede exactamente lo mismo. Son los colegios profesionales los que se encargan de informar sobre estas obligaciones al inicio de la actividad. Profesiones como las sanitarias o la abogacía deben contratarlo antes de comenzar a ejercer.

Este seguro también es obligatorio en aquellos locales que ofrezcan actividades recreativas o espectáculos como auditorios, circos, cines, teatros, establecimientos de actividades sociales o culturales, de juego, de actividades botánicas, zoológicas o geológicas, centros de ocio y recreativos, complejos deportivos, boleras, gimnasios, cafeterías, restaurantes, autoservicios o bares.

Por su parte, las empresas de transporte público colectivo, agencias de viajes, el transporte escolar, los promotores de espectáculos pirotécnicos o de festejos taurinos también necesitarán un seguro de estas características.

Además de todos estos tipos de negocios y profesiones, también existen otras a las que no se les exige un seguro de responsabilidad civil, aunque eso no quiere decir que no sea conveniente contratarlo.

Este tipo de pólizas constituye un instrumento que dota de seguridad tanto a los usuarios y consumidores de los servicios empresariales o profesionales como a los autónomos y empresarios. La cobertura que ofrecen las aseguradoras garantiza que un negocio pueda realizar ciertas actividades. Este es el motivo principal por el que contar con este seguro es más que aconsejable, aunque en tu caso no fuera obligatorio. 

Además de esta ventaja principal, las coberturas que tiene esta póliza son asegurar tus circunstancias profesionales o personales tales como:

- Indemnizaciones por daños materiales, corporales y/o patrimoniales causados a terceros derivados de tu vida profesional o personal. 

- Constitución de costas judiciales y fianzas exigidas, defensa penal, jurídica y protección.

- Reclamación de daños.

- Infidelidad de los empleados.

- Propiedad intelectual.

Estas coberturas variarán en función de la actividad económica que se desarrolle y del sector al que pertenezcas.

Los seguros de RC cubren tanto a empresas como a autónomos el coste de la defensa jurídica frente a posibles reclamaciones y las indemnizaciones de las que pueda derivar una responsabilidad. La prima de este tipo de pólizas en el año 2017 rondaba los 633 euros anuales, pero existen multitud de tipos de seguros de RC y diversas actividades.

Para que puedas tener una idea aproximada de lo que implica un seguro de estas características para un pequeño negocio y prestando atención a las contrataciones de 2018, podemos decir que la prima puede ser de alrededor de 175 euros. Algunos autónomos pueden pagar menos de 150 euros y un 6 % más de 300 euros de forma anual. Aunque lo habitual es que la prima ronde los 215 euros.

A pesar de estas cifras, debes tener en cuenta que son medias anuales y que tan solo pueden servirte de referencia para tener una ligera idea, ya que el importe total de la prima dependerá de varios factores tales como:

- Capital de responsabilidad civil. Suele ser de 150 000 a 600 000 euros, pero en algunas pólizas puede ser superior.

- Tipo de seguro y coberturas incluidas. Los seguros de RC profesional tienen una prima superior a los de responsabilidad civil general.

- Número de empleados. A mayor número de trabajadores mayor será el riesgo de accidente, por lo tanto, la prima puede variar.

- Actividad profesional o actividad del negocio. Afecta al riesgo de reclamación de esa responsabilidad civil, lo que influirá en el precio final de la póliza que contrates.

- Facturación del negocio. Las empresas con un gran volumen de facturación tienen una mayor prima en la póliza.

Te hemos ofrecido una serie de precios muy aproximados, porque es imposible ofrecerte un precio cerrado sin conocer cuál es tu volumen de trabajadores, tu facturación o el sector en el que trabajas. Por eso, es muy importante que a la hora de contratar un seguro de RC cuentes con un buen asesoramiento profesional.

La protección de los clientes debe comenzar antes de que contraten ningún tipo de póliza, por lo que tu asesor debe explicarte cómo puedes estar completamente cubierto con tu seguro de responsabilidad civil para cualquier posible eventualidad. Eso sí, también deberá aconsejarte cómo evitar contratar coberturas que no necesitas para tu negocio o que pagues de más por las coberturas que sí necesitas. Para que sepas cuánto dinero es justo que pagues por tu póliza, acude a un profesional experimentado y refuerza la seguridad para construir tu actividad empresarial con garantías.