Debido a la creciente presión por las consecuencias del cambio climático, todos los sectores atraviesan grandes transformaciones y la impresión es una de ellas. Las impresoras ecológicas forman parte de la vanguardia medioambiental y llegaron para quedarse. Si bien son todavía poco conocidas, esta innovadora forma de plasmar colores, formas y diseños será la norma en pocos años. ¿Todavía no sabes en qué consiste? Aquí te hacemos un resumen.
¿A qué nos referimos cuando hablamos de impresoras ecológicas?
En esencia, se trata de tres aspectos fundamentales: tecnología de impresión, tinta y materiales a tratar. En la impresión sostenible, cada eslabón de esta cadena está orientado a minimizar el impacto ambiental.
En la práctica, esto se traduce en menos consumo de energía, mínima contaminación y desperdicio, todo esto sin incurrir en un gasto excesivo, puesto que las tecnologías del reciclaje facilitan el aprovechamiento de subproductos. El papel, el cartón y diversos materiales de impresión son susceptibles de ser transformados para un nuevo uso.
Últimas tecnologías en impresión ecológica
Este método es uno de los más sostenibles. Su consumo de energía es reducido, gracias a que puede apagarse y encenderse de forma automática. Dicha cualidad minimiza los gastos energéticos entre trabajos, lo que redunda en menos emisiones de CO2.
Su enorme ventaja reside en que no requiere de una lámina de impresión. Es decir, realiza su trabajo directamente sobre la superficie y requiere poco tiempo para completar los diseños.
Este método consiste en excluir por completo la utilización de agua durante el proceso de impresión. Así, se evita la liberación de compuestos orgánicos volátiles, o VOC por sus siglas en inglés, responsables de la contaminación. En lugar de H20, se utiliza una capa de silicona para repeler la tinta. ¿El resultado? Una impresión de más calidad y eco-amigable.
Otros aspectos de la impresión sostenible
En la búsqueda de un producto terminado realmente ecológico, hay que considerar más aspectos. La tinta y el material sobre el que imprimir serán factores decisivos que no solo repercutirán en la calidad, sino también en la sostenibilidad del proceso.
Las tintas con base de petróleo o plástico son muy contaminantes. Si bien logran buenos acabados, su calidad no compensa el enorme daño medioambiental. Como alternativa existen tintas basadas en aceites vegetales, dentro de las que destacan tres:
- Tinta basada en soja: es una de las más utilizadas, ya que reproduce una excelente calidad, comparable a las tintas tradicionales.
- Tinta a base de aceite de linaza: la segunda más popular, gracias a su calidad y bajo coste.
- Otros aceites vegetales: destacan el maíz, la canola y el cártamo, aunque su acabado no sea el mejor y supongan un precio ligeramente más alto.
- Materiales que no dañan el planeta
Este es uno de los ámbitos donde más se ha innovado en beneficio de la naturaleza. Para considerarse como tal, una base de impresión sostenible debe cumplir cuatro requisitos fundamentales:
- Atravesar un proceso de reciclaje o reutilización: esto es de especial importancia en materiales del plástico, pero también del papel y cartón.
- Disponer de trazabilidad a un origen eco-amigable: sobre todo tratándose de fuentes madereras.
- Ser 100% biodegradable: por lo que quedan excluidas las fibras de derivados del petróleo, como el plástico.
- No emplear en la elaboración químicos peligrosos para el entorno natural, como blanqueadores basados en cloro.
¿Qué materiales tienen estas propiedades? El polipropileno, por ejemplo, es un termoplástico reciclable con una alta tolerancia a las temperaturas. También está el ácido poliláctico, un bioplástico que emula o supera las propiedades de los derivados no-renovables. Dicho material puede ser fabricado con fibras vegetales, por lo que se degrada en agua y a partir de los 60º centígrados.
En la gama de materiales más habituales, el papel y el cartón pueden ser igual de ecológicos. Las fibras de papel alcanzan cotas de sostenibilidad inigualables cuando están certificadas como de emisiones neutras. Derivados de la madera con este distintivo son uno de los soportes más baratos, eco-amigables y con mejor acabado.
Hasta aquí nuestro repaso a las principales características de la impresión ecológica. Como ves, existen cada vez más alternativas disponibles, sostenibles y menos contaminantes, que puedes aprovechar para la publicidad de tu negocio.
Apostar por estas opciones es una de las formas más sencillas de mostrar cómo tu empresa está comprometida con la protección del medioambiente. La sostenibilidad es uno de los aspectos que cada vez más clientes tienen en cuenta a la hora de elegir qué productos comprar, por lo que el beneficio es doble: mejorar tu imagen de marca y ayudar a la conservación del planeta.
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