La profesión de intérprete es una gran desconocida. Muchas veces se confunde con la de traductor, con la que tiene aspectos en común. ¿Quieres saber cómo este profesional puede ayudar a tu empresa? A continuación te explicamos todo lo que debes saber sobre los intérpretes de idiomas y cómo su trabajo es clave en muchas situaciones.
¿Qué es un intérprete de idiomas?
Se trata de un profesional cuya principal función es la de servir de puente de comunicación entre dos o más interlocutores que no hablan el mismo idioma. Son muchas las ocasiones en las que su presencia es necesaria: conferencias, reuniones entre empresas, negociaciones comerciales...
¿Crees que un intérprete se dedica única y exclusivamente a traducir a viva voz de un idioma a otro? Nada más lejos de la realidad. Se trata de un profesional muy cualificado, cuyos conocimientos no se limitan a dominar una lengua (o varias) de un país extranjero. También conoce aspectos relacionados con ese país, como su cultura, costumbres, filosofía... lo que lo convierte en un profesional muy valioso, por ejemplo, a la hora de realizar negociaciones comerciales con otro país.
La profesión de intérprete requiere, además de un dominio pleno de otra lengua, excelentes habilidades como documentalista para conocer diferentes temas y poder utilizar la terminología, muchas veces técnica, cuando la situación lo requiera. A esto hay que sumar la capacidad de concentración, ya que la traducción oral de un idioma a otro debe realizarla en décimas de segundo, sin ningún tipo de apoyo.
¿En qué se diferencia entonces de un traductor? En ocasiones ambos términos se utilizan como sinónimos, pero son diferentes. Si bien es cierto que el traductor y el intérprete se encargan de traducir de un idioma a otro, cada uno lo hace a través de un determinado medio. Mientras que el traductor lo hace por escrito, el medio del intérprete es oral.
¿Qué tipos de interpretación existen?
- La más conocida es la interpretación simultánea en la que el intérprete tiene que traducir el discurso que está dando el orador en tiempo real, sin posibilidad alguna de consultar glosarios y diccionarios.
Dentro de esta modalidad podemos encontrar el chuchotage (o interpretación susurrada), donde el intérprete se sitúa junto a los interlocutores y va traduciendo discretamente al oído de su cliente. Esta es la opción más empleada, por ejemplo, en negociaciones comerciales, visitas de inversores extranjeros...
Los intérpretes de lengua de signos también entrarían dentro de la categoría de interpretación simultánea.
- La interpretación bilateral es aquella en la que únicamente se traduce a dos lenguas al mismo tiempo. El ejemplo más sencillo es el de una reunión corporativa con un socio alemán y otro español. En este caso, el intérprete debe traducir lo dicho por el uno y por el otro.
- La interpretación consecutiva, por su parte, es aquella en la que el orador da su discurso mientas el intérprete toma notas, y este último tiene unos segundos de margen para traducirlo a la otra lengua.
Principales tareas de un intérprete profesional
- El intérprete de idiomas es fundamental en muchas situaciones: conferencias, ferias, congresos, juzgados... Siempre que el emisor y el receptor no compartan el mismo idioma es necesario contar con sus servicios.
- La presencia del intérprete de conferencias es muy frecuente. A este tipo de eventos suelen acudir participantes de diferentes países, y el intérprete es el encargado de traducir hacia un único idioma. En este caso, trabaja desde una cabina, traduciendo de forma simultánea el discurso de los interlocutores, mientras que los participantes en la sala están escuchando el mensaje a través de unos auriculares.
Claro que su trabajo empieza mucho antes de meterse en la cabina. Estudia con todo lujo de detalles la documentación de la conferencia, e incluso busca anteriores ponencias del orador para escuchar su voz (tono, ritmo, volumen...). Y, por supuesto, analiza con detalle el vocabulario y los conceptos clave de las lenguas de origen y destino.
- La presencia de estos profesionales también es necesaria en juzgados, en casos donde acusados, víctimas o testigos necesitan a alguien que domine su lengua para poder traducir sus declaraciones.
Como ves, un intérprete puede ser un importante aliado en múltiples situaciones. Su profesionalidad y conocimientos resultan realmente útiles y pueden inclinar la balanza a tu favor en negociaciones internacionales.
Ahora que sabes cuáles son las alternativas que te ofrece, ¿te planteas contratar un servicio de interpretación? Si es así, recuerda que en nuestro portal encontrarás
agencias especializadas que pueden ayudarte. Pídeles
presupuesto sin compromiso y comprueba de primera mano todas sus ventajas.