¿Has experimentado tristeza, cansancio o falta de sueño al regresar al trabajo tras las vacaciones? Es algo natural para un gran porcentaje de personas. Según, las últimas estadísticas de Adecco, el síndrome postvacacional afecta a un 37 % de trabajadores.
Sin embargo, las buenas noticias son que existen soluciones para hacerle frente. ¿quieres saber cuáles son los consejos que los expertos en coaching para empresas aplican para superar este trastorno tan habitual? Sigue leyendo y te lo contamos.
¿Qué es el síndrome postvacacional?
Este síndrome también se conoce como depresión postvacacional. Las personas que lo experimentan padecen síntomas leves de depresión y ansiedad al tener que adaptarse de nuevo a su rutina laboral. Estos síntomas pueden prolongarse durante días, semanas e, incluso, meses. Entre los indicios más habituales están:
- Malestar general.
- Falta de concentración y bajo rendimiento.
- Irritabilidad y cambios de humor.
- Sudoración, palpitaciones, dolores de cabeza.
Incluso para personas que disfrutan de una vida profesional plena, la vuelta al trabajo y a las rutinas domésticas supone una fuente de estrés y una sensación de pérdida. Es una reacción natural ante un cambio de hábitos. Piensa que pasas de gozar de jornadas interminables de tiempo libre a volverte a encorsetar en un horario rígido y en unas rutinas de actividad laboral, y la mente se rebela.
Aparece entonces la apatía, baja el estado de ánimo e incluso notas una falta de energía general por lo que todo te cuesta más. Y si tus condiciones y situación de trabajo no son ideales, todos estos síntomas se agravan mucho más.
Sin embargo, para la Organización Mundial de la Salud (OMS) este síndrome no se considera una enfermedad y según la Sociedad Española de Medicina de Familia y Comunitaria está más relacionado con aspectos emocionales derivados de los cambios de rutina.
Seis consejos para reducir el síndrome postvacacional aplicando el coaching
Como mínimo, dos veces al año la mayor parte de los trabajadores va a tener que hacer frente a este problema. ¿Cómo enfocan esta situación los expertos en coaching para empresas? Aquí te explicamos las seis recomendaciones más efectivas para que la vuelta al trabajo no se te haga tan cuesta arriba:
Es una cuestión de adaptarse a la nueva situación. Asumes que la tristeza que te provoca volver a la rutina es inevitable, y no sucede nada por sentirla. Es una especie de duelo y se debe pasar para alcanzar la aceptación. Se trata de mantener una actitud realista.
- Regresa a las tareas habituales de manera paulatina.
No es bueno pasar de tener todo el tiempo del mundo para hacer en cada momento lo que te apetezca a estar hasta el cuello de tareas. Cambia de manera progresiva los horarios y sigue manteniendo los tiempos de descanso. Dedica también espacio al ocio.
Pero ¿y si la tristeza que sientes es una alerta de que tu trabajo te hace infeliz? Quizá debes tomar medidas al respecto y plantearte las cosas que te hacen sentirte mal. Plantea alternativas de cambio.
- Nuevos planes
¿Y volver a la rutina saliendo de la misma? Busca actividades que te apetezca hacer: cursillos, talleres, excursiones de grupos, etc. Practicar un nuevo deporte siempre estimula y carga las pilas.
Crea tu nueva agenda con lo que te apetezca hacer. Así, la rutina no será tan dura y tendrás nuevos alicientes. Plantearse objetivos renovados y metas ayuda a mirar hacia delante. Son estímulos para afrontar la vida diaria. Por ejemplo, preparar una carrera deportiva, planificar el próximo viaje, buscar información sobre un curso para estudiar.
Planifica la actividad laboral de forma racional. Plantea objetivos de trabajo desde el primer día para volver a coger el hábito. Pretender estar al cien por cien tras quince días o un mes de parón es complicado y estresante. Regresar de manera escalonada y planificar las tareas día a día es un buen modo de no quemarse nada más llegar.
- Planea actividades de empresa
La mayoría de tus compañeros están pasando por la misma situación. Puedes planear “quedadas de apoyo postvacacional” a la salida del trabajo para ponerte al día con ellos. También organizar una comida desenfadada un fin de semana como actividad de inicio del “curso laboral” es una manera genial de reencontrarse con la gente del trabajo.
Tras un día de trabajo después de la vuelta de vacaciones puedes hacerte regalos, en forma de pequeños extras de motivación que te animen como, una cena, una sesión de cine o regalarte un nuevo libro. En definitiva, detalles que ayudan a sobrellevar la vuelta del día a día.
- Retoma la vida social fuera del trabajo
Después de las vacaciones siempre hay cosas que contar a la familia y a las amistades de siempre. Vuelve a recuperar tu vida social. Haz planes de reuniones, excursiones, comidas o cenas en casa de amigos. Compartir el tiempo con las personas que te importan te ayudará a recordar que "la vida normal" también tiene muchos aspectos buenos.
En definitiva, tras volver de vacaciones el síndrome postvacacional y sus síntomas son inevitables. Sin embargo, existen maneras de minimizarlos o que su duración no se prolongue. Recuerda planificar el regreso a la actividad laboral de modo gradual, trazar nuevos objetivos en forma de cursos, salidas o deportes como motivación, recuperar el contacto con tu familia y amigos y hacer planes en pandilla.
¿Eres empresario y te preocupa cómo tu equipo está afrontando la vuelta al trabajo? Entonces, pide ayuda a los
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